La fitoterapia tradicional es un sistema médico alternativo que usa plantas o hierbas para tratar enfermedades o desequilibrios físicos y psíquicos. Los fitoterapeutas han desarollado una amplia gama de formas galénicas, como infusiones y decocciones, tinturas madres, extractos de plantas, cápsulas, etc. La fitoterapia se basa en los principios activos de las plantas, el estudio de sus métodos de extracción y la elaboración de medicamentos naturales. En las últimas décadas, la fitoterapia tradicional se ha unido a la farmacología moderna y ha sido objeto de estudios clínicos que han demostrado su eficacia en muchos casos.
Por otro lado, la homeopatía es un sistema alternativo que usa diluciones extremas de sustancias vegetales, animales y minerales para tratar enfermedades y otras condiciones. Estos principios activos se diluyen durante un proceso de dinamización y se administran en forma de gránulos o gotas diluidas en agua. La homeopatía dice que al diluir una sustancia tóxica y dinamizarla, se le pueden otorgar propiedades curativas, convirtiendo un veneno en un remedio. El mecanismo de acción de la homeopatía es difícil de probar, pero muchas personas afirman tener resultados positivos, lo que indica que esta ciencia merece ser investigada más a fondo.
Una diferencia principal entre la fitoterapia y la homeopatía es la concentración de los principios activos. La fitoterapia trabaja con concentraciones más altas, mientras que la homeopatía utiliza diluciones extremas. Por definición, la fitoterapia trabaja solo con material vegetal, la homeopatía por su lado utiliza también sustancias del reino animal y mineral. La dosificación homeopática se basa en la vibración de una sustancia diluida, mientras que la fitoterapia se basa en la cantidad de planta utilizada o en una cantidad determinada de principios activos.
También podemos mencionar las Flores de Bach, que son terapias alternativas que actúan a un nivel vibratorio muy sutil y se asemejan más a la homeopatía que a la fitoterapia. Se elaboran con flores frescas de diversas plantas que se colocan en un recipiente con agua y se exponen al sol por un tiempo específico. Luego, se agrega brandy como conservante y se agita el recipiente con fuerza. Las flores de Bach también se elaboran mediante un proceso de dinamización y se administran en forma de gotas muy diluidas, por lo cual es difícil cuantificar los principios activos.
En conclusión, lo más importante es mejorar la salud y encontrar lo que más funcione para cada persona. Antes de iniciar cualquier tratamiento alternativo, es esencial consultar con un médico, ya que algunos tratamientos pueden interactuar con los medicamentos recetados y tener efectos secundarios no deseados. Es fundamental elegir un tratamiento seguro y eficaz y buscar asesoramiento de homeópatas o fitoterapeutas profesionales con amplia experiencia en sus disciplinas respectivas.