Aceite de Argán

El aceite vegetal de Argán proviene de la prensa en frío de las semillas de una planta nativa de Marruecos: Argania spinosa.  El aceite de Argán es parte de la cultura de los Bereberes desde hace siglos.  Lo usan tanto en su alimentación como para el cuidado de la piel y el cabello.

El aceite de Argán contiene betacarotenos, precursores de la vitamina A, lo que le brinda sus propiedades beneficiosas y regeneradoras para la piel.  Este aceite vegetal cumple un papel grande en la renovación y regeneración celular.  Es particularmente indicado en casos de arrugas y sequedad de la piel.  Su uso cosmético permite reducir las huellas dejadas por el acné, secuelas de varicela u otras lesiones de la piel tales como irritaciones, estrías, etc.  Se puede utilizar como suavizante y regenerador de la piel en casos de eczema, psoriasis y otras irritaciones cutáneas.

El aceite de Argán es también un excelente producto para el cuidado del cuero cabelludo. Tiene la propiedad de fortalecer el cabello seco y dañado devolviéndole su aspecto suave y brilloso.  Es muy útil también para restaurar las puntas del cabello dañado y para fortalecer las uñas quebradizas.

Utilizado internamente, el aceite de Argán rostizado tiene la propiedad de reducir los niveles de colesterol sanguíneos y ayuda a controlar la presión arterial.  Este aceite se puede emplear para prevenir la aterosclerosis.  Es también un buen aliado para luchar contra la constipación y es indicado en casos de obesidad para ayudar a regular el peso corporal.